Mucho tardaba ya Nadia Sheikh en desvelar su nuevo movimiento en formato single pero ya lo tenemos entre manos y disfrutándolo al máximo. Tuvimos la suerte de ser 'visitados' en el trabajo por la artista de Castellón (afincada en Inglaterra desde hace cuatro años) y, además de sentir su energía y su auto-determinación para con sus objetivos, también sentimos lo complicado que está despuntar en una ciudad como Londres y cómo gestiona sus momentos 'vitales' allí teniendo la música como desahogo expresivo y emocional.
Lo que sí es cierto es que, a pesar de la competencia de la gran urbe, va haciendo sus pinitos, dejándose ver por aquí y por allá, currando en círculos cercanos a ese 'contacto' que está por venir, sin prisa pero sin pausa, sin parar de tocar en cualquier club londinense que la programe y, lo que más importa, sin parar de componer y crear. Existen largos períodos de silencio discográfico, sí, pero se entiende debido a que todavía no posee un sello que la lleve teniendo que auto-editarse sus propias canciones. Salta que viene lo bueno...