NOTA: 90%
Última andanada de esta primera Trilogía de 'Oleadas Stoner' de 2020 (aunque ya viene otra en camino ji, ji..) que cerraré con otra obra maciza e inescrutable como la del útimo disco de los australianos de Melbourne, Holy Serpent, su tercera obra hasta la fecha nominada como Endless (2019). La banda, formada en 2014 como cuarteto, cuenta con dos discos anteriores, Holy Serpent (2015) y Temples (2016) que ya nos mostraron sus movimientos tectónicos a base de fusionar sin remisión y con mucho gusto a bandas del calibre de Mars Red Sky, Windhand, Monolord o Spacelug entre otros, de hecho, su frontman, Scott Penberthy, podría ser perfectamente un gemelo de Julien Pras de los Sky tanto por su físico como por su forma frágil y vaporosa de vocalizar entre la muralla inabarcable producida por su banda...
¿Y qué se puede decir de un disco tan aplasta-cráneos como Endless (2019)?, pues que el viaje, a priori incómodo para el neófito, se convierte en una auténtica experiencia sensorial, pero también extra-sensorial, un disco con unos riffs stoner doom insondables, enormes, eterrrrnos que se complementan a la perfección con una base rítmica hormigonada en contraposición con esa voz afligida y en constante lamento de Mr. Penberthy, sí, ahí tenéis el corte que arriba abre la crítica, un "Daughter Of The Light" tremebundo y abisal de generosos siete minutos, estructuras en bucle y atmósferas vaporosas mientras observas desde la playa y despojado de toda artificialidad y pudores morales lo que la fuerza de la naturaleza te tiene preparado a causa de lo que le estamos haciendo. El poder monolítico de "Lord Deceptor" e "Into The Fire" no se quedan atrás, de hecho me encanta la supuesta 'marcialidad' y 'sabbathismo' del segundo, en "Hourglass" se vuelve a poner incapié en el trabajo de dolosas armonías vocales y detonación monolítica que pasa sin piedad alguna al hermético "For No One", todo fuzz al '11' y eternidad sónica en su composición más larga pues ronda los 8 minutos con un tratamiento vocal más dinámico y menos tristón. El tracklist se cierra con "Marijuana Trench" de comienzo acústico y desnudo al que poco a poco se le van colocando las capas de dolorosa tortura medieval y Armaggedon merecido. Los Holy Serpent eran inexplorados por un servidor hasta esta reseña pero, wow!, os aseguro que no voy a dejar pasar más su implacable tectonismo y dramática eternidad...
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