DATURA4 "BLESSED IS THE BOOGIE" (2019), 'OLA DE PASIONES... OLEADA DE 'STONER' 2019!!!' (PART CXXV),

NOTA: 85%

Continuamos con esta nueva trilogía de 'Oleadas Stoner' tras el 'kit kat Uzzhuaïa'. Turno para unos aussies muy queridos en la parroquia roquera como los Datura4 que, si bien están muy lejos de ser clasificados como una banda Stoner al uso, cada vez más se dejan abrazar por el fuzz desértico y la crudeza de su sonido. Dos discos que dieron en la diana a la primera como su brutalísimo Demon Blues (2015) y su excelente Hairy Mountain (2016) elevaron a los altares del boogie blues y el heavy psych a los de Fremantle, Dom Mariani (vocals, guitar), Greg Hitchcock (vocals, guitar), Warren Hall (drums) y Stu Loasby (bass). Ha llegado el momento de desgranar como merece su tercera y, de nuevo, certera andanada titulada de forma inmejorable como Blessed Is The Boogie (2019)...

Deja que resuene el Boogie aussie en toda su extensión...

Y bien, el tercer album de los australianos es absolutamente adictivo, de esos discos que no paras de escuchar una y otra vez sorprendiéndote todas ellas moviendo alguna parte de tu cuerpo al ritmo que te marcan los excelentes 10 cortes facturados. Sobre una base eminentemente blues, se dejan querer por estilos como el stoner, el heavy blues, la psicodelia, el powerpop y, cómo no, ese toque boogie que hace, sobre todo en la primera parte, que no pares de agitar tu cuerpo y silbar sus melodías y riffs. Está claro que la banda ha planteado el disco en dos mitades bien diferenciadas, la primera mucho más árida y con mucho fuzz desértico sobre excitantes ritmos bluesys caso del inicial "Black Dog Keep Running", "Looper" o los excitantes y bailongos "Run With Lucy" y "Ooh Poo Pah Doo" con  ese blues embadurnado de dunas y calor. En "Sounds Of Gold" comienza el cambio, las melodías derivan hacia el powerpop y el glam a pesar de tener la distorsión todavía presente, "Evil People, Pt.2" nos sumerje en un viaje lisérgico de blues hipnótico y experimental, "Not For Me" ya no tiene el desierto metido en su estructura, el powerpop se hace con todo el protagonismo y así suenan los dos cortes finales con "Cat On A Roof" y "City Of Lights", el primero más psych y con unos punteos y teclados de fábula, el segundo mucho más reflexivo y frágil con un final hasta con cierto halo progresivo. En conclusión, si bien no es un disco redondo, los Mariani y Hitchcock ya se pueden dar por satisfechos porque han vuelto a facturar uno de los discos del año. Quedáis avisados!!!...