CINE: "BOHEMIAN RHAPSODY" (2018), LA REALIDAD SIGUE SUPERANDO UNA ACEPTABLE Y EMOTIVA FICCIÓN.

NOTA: 70%

Creía que no iba a poder verla en pantalla grande pero, casualidades de la vida, he podido por fin visionar Bohemian Rhapsody (2018) donde había que verla, en el cine. Una leyenda como Freddie Mercury y un gigante como Queen bien necesitaban de un 'biopic' a lo grande y así ha sido con el increíble despliegue de medios y el gran presupuesto utilizado.

Me debo sincerar con vosotras/os, todo amante de la música en general y del Rock en particular ha pasado necesariamente su 'etapa Queen' en la que el descubrimiento de todos y cada uno de sus discos suponía un auténtico reto a la par que una gozada para los oídos. Fue mi caso a principios de los 90's. Pero claro, la llegada del 'Planeta Seattle', el Crossover, el nuevo Metal con Pantera y Sepultura a la cabeza, etc,... hicieron que mi enganche a Mercury desapareciese casi por completo hasta esta cita cinematográfica de la que pretendo hablaros hoy, no sólo de forma analitico/crítica, sino también desde el punto de vista nostálgico y de fan declarado de la banda...
Bajo un guión escrito por Anthony McCarten y una dirección que comenzó con Bryan Singer (Sospechosos Habituales, Superman Returns,...) siendo finalizada en el último momento por Dexter Fletcher, la película narra la génesis, desarrollo y auge de una de las bandas más icónicas de la era moderna pero sobre todo se centra en la vida de un icono indiscutible de la música popular como es Freddie Mercury acabando con el legendario concierto de Live AID en 1985.

Y ahora mis impresiones. Para empezar, que Brian May y Roger Taylor hayan supervisado en todo momento guión y rodaje me parece tan lógico como loable, me explico, lógico por saber que el film se iba a centrar en Mercury y no querer quedar como meras comparsas en la ficción cuando en realidad nunca lo fueron. Loable en tanto en cuanto a que podían haber adoptado una posición cómoda no implicándose y cobrando tan sólo la pasta y ha sido todo lo contrario, estando en todo momento pendientes aunque dejando trabajar.

Con respecto a la trama dramática, obviamente el hacer una película para 'Todos los Públicos' hace que se edulcoren más cosas de lo deseado, que se modifiquen momentos y circunstancias para dar más tensión, más drama o más pompa al asunto y esto es en lo que me ha chirriado en varios momentos como, por ejemplo, el tratamiento 'de pasada' que se le ha dado a Jim Hutton cuando él estuvo ahí mucho tiempo atrás de lo que se cuenta. También Mary Austin es retratada como un personaje plano y abnegado cuando, en realidad, participaba de la maquinaria Queen con gusto. Dejando de lado la innecesaria (y mentirosa) trama con el mánager de Mercury, Paul Prenter, lo que más me molesta son dos cosas; lo primero son las crisis de Mercury que desembocan en una inexistente separación de la banda (imagino que para aportar el clímax final para acabar con Live AID) y otra es el tratamiento excesivamente sugerido de la homosexualidad/bisexualidad de Freddie que se resuelve con miradas y con muy pocas frases de guión cuando él, ya desde mediados de los 70's, nunca ocultó su orientación sexual y mucho menos ocultaba sus escarceos a Mary Austin. Estamos en pleno S.XXI, por favor.

Eso sí, la dirección de las escenas en el estudio con escenas realmente divertidas e ingeniosas y, cómo no, las fuerza de las imágenes finales en el mil veces citado Live AID, fueron los momentos más emotivos y, por qué no decirlo, los que más me provocaron 'gallina de piel' y alguna lagrimilla aislada, eso sí, gracias a un elenco actoral protagonista a la altura de las circunstancias con un Rami Malek practicamente perfecto y aportando esa energía tan especial y carismática que el eterno Freddie Mercury nos brindó y nos brindará por siempre.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

RII: Después de leer tu crítica, la pregunta es la siguiente: ¿Es posible, señores de la Industria Cinematográfica, que se nos deje de tratar como idiotas llenos de prejuicios y tabus, enamos emocionales y superficiales unidades de carbono? Cualquiera que haya seguido la trayectoria del grupo y leído los rios de tinta que se escribían sobre ella y sus componentes, este "docudrama" es lo más alejado a la realidad y cualquier melómano queenero que se precie de serlo así lo percibirá. Triste sociedad que come mierda y se la traga sin pestañear.

JLO dijo...

soy fan, fui a verla e hice la crítica... sin ser tan viscerla como el anterior comentario jaja debo decir que la disfruté pero por eso de mi fanatismo, la película es por momento homofóbica y si estás representando al casi mayor ícono gay que tuvo esa época musical es un error garrafal... Austin es mas importante que todo lo demás? su enfermedad no era digna de contarse? lo mejor de la película es una banda tributo que al final reproduce casi calcado el show Live Aid? hubiesen puesto las imágenes reales y hubiese sido mas jugado.

Otra cosa: trata sobre Freddy, no sobre Queen. Por si no lo saben May y Taylor digo. Sin él no existiría nada. Saludos master y espero que no te estemos haciendo enojar aunque vos decís casi lo mismo a pesar de tu entusiasmo como ex fan, abrazo!!!

bernardo de andres dijo...

Como nunca fui de queen no la he visto. Si me parecw una de las bandas mas sobrevaloradas de la hisyoria. Paso de mero hard rock sin chicha a imitar a 10cc aunq aqui si ya tuene mucho mas de interes. Luego carne pop con baladas engilantes y algo de dance. Pero entiendo q guste. Si la dan tele la veo pero.me temo q como.es pa todos publucos sera descafeinado