Tenía que pasar, los Corazones Eléctricos tenían que agitar su corazoncito y bombear su apasionada sangre en un momento tan especial como éste. Lejos de ofrecer versiones de otros artistas (todo se andará...) han preferido decantarse por ofrecer su propio material (que a nadie se le olvide que la gira de presentación de Arte y Oficio (2020) se ha visto truncada por la mitad por culpa del puto bicho) con un tema que para un servidor se ha convertido, desde ayer mismo, en uno de los símbolos/himno claves para sobrellevar el confinamiento y la lucha contra el enemigo que acecha ahí fuera. De paso, es muy lícito el seguir promocionando sus nuevas canciones y ofrecer una nuevo formato gracias/por culpa del streaming al que ya empezamos a acostumbrarnos todos y que a ellos les ha quedado de maravilla. Salta y descubre una canción maravillosa en todos los sentidos...
Tal y como apunta Mr. Monteagudo en la explicación de este clip en RRSS, a Quique Cuquerella esto le pilló un poco 'en bragas' sin kit de batería ni nada que se le parezca pero solventa de categoría su aportación a la canción con una simple maraca y un mini djembé de juguete. Un crack que está hecho el tío. En cuanto a Kako y Pau, qué queréis que os diga, ¡lo bordan también!, extrayendo toda la esencia interpretativa y el carácter introspectivo que pide la sentida composición.
Me despido con una reflexión y una confesión que les hice a ellos mismos en Instagram que creo que refleja a la perfección lo que siento cuando visiono el clip recordando todas las escuchas que llevo del tema:
´Vuestra capacidad para emocionar es inabarcable... ¡ME HA ENCANTADO!, y mira, dejadme que os diga una cosa, una intuición que tuve desde la primera vez que la escuché, siempre he sentido que 'Sangre y Revolución' iba a ser algo importante, que iba a abanderar algo, a simbolizar una causa superior... y mira por donde, aquí te tengo CANCIÓN, aquí os tengo trayéndomela de vuelta convertida en un himno a la vida, a la lucha y a la resistencia contra el 'enemigo'... GRACIAS'.
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