NOTA: 60%
No, esta vez no me he dejado engatusar por Mr. Stallone. He tardado en visionar la peli (lo hice hace tres semanas en el avión que me llevaba a New York...) y si en un principio me arrepentí de no haber acudido a verla en pantalla grande, ahora puedo quedarme tranquilo porque Creed 2: La Leyenda de Rocky (2018) no es, ni mucho menos, para tanto.
La franquicia 'Rocky' sigue dando réditos a Sly, eso está claro y respeto que siga exprimiendo la gallina de los huevos de oro, además, tener de vuelta a Ivan Drago, su contrincante más complicado (con todos los respetos Apollo), era un aliciente extra a pesar de que tanto Balboa como Drago o, mejor dicho, Sylvester y Dolph Lundgren no estén ya para subirse a un cuadrilátero y solventen sus eternas rencillas desde las esquinas y toalla en mano. Éste era para mí el mayor reclamo de la película, lo que me hacía desear ir al cine para comprobar si el odio entre aquellos púgiles que se dieron de hostias hasta en el carnet de conducir en los 80's seguía latente y, si bien esto se ha mantenido más o menos, la trama principal ha hecho aguas por todos lados...
Como os decía antes del salto, la peli intenta ser un quiero y no puedo, el planteamiento de escenas y tramas es practicamente un calco a Creed I 'éxito-pérdida-crisis en el ring-bajada a los infiernos-motivación en el último suspiro-pelea final', ¡¡¡todo se ve venir a leguas!!!, no hay nada y digo NADA que sea nuevo o que sepa diferente de lo ya visto en la saga. En cuanto a la labor actoral muchos altibajos, precisamente la guapa parejita de protagonistas Michael B.Jordan/Tessa Thompson defienden interpretaciones planas, flojísimas diría yo, con una Tessa a la que se le nota que no está a gusto en su papel en ningún momento, ni tan siquiera cantando. Y qué decir de Jordan, impostado todo el rato, quejica, sobreactuado y... ¡¡¡nulo demostrando maneras en el cuadrilátero por mucha 'percha' que se tenga!!!. En cuanto a Drago y su hijo, Lundgren poco tiene que hacer para hacerlo bien, su caracter es frío e inexpresivo pero solventa a medida que pasa el metraje; pero el tan cacareado Florian Munteanu me parece una masa de músculos sin más, con muy poco carisma como sí lo tuvo Drago en la peli del 85'. Y precisamente aquí desemboco en las peleas, porque también me han decepcionado, la labor técnica es descomunal, de sobresaliente pero claro, cuando el planteamiento y las coreografías se basan en cómo doy mejor a la cámara y dar el mejor efecto y no en dar credibilidad al asunto pues...¡para qué os voy a contar!, todo se resume en dos animales de gimnasio, sin un ápice de alma y con una más que dudosa técnica boxística midiéndose sin más, sin la épica de antaño, todo muy S. XXI, es decir, de 'usar y tirar' y a otra cosa mariposa.
En fin, obviaré hablar del entrenamiento para no cargármela por completo (...), eso sí, si hay una cosa que me ha gustado es la evolución en la trama de Drago, de hecho Lundgren acometió su papel exorcizando demonios interiores de niñez y juventud por el maltrato que recibía de su padre por lo que esa parte final en la que entiende el desenlace final en el cuadrilátero y el acercamiento más humano hacia su hijo se me antojan de lo más creíble y sorprendente de la película junto con el diálogo Balboa/Drago en el restaurante del primero.
Y hasta aquí, o bueno, hasta dentro de muy poco porque la próxima 'Stallonada' no se hará esperar al faltar menos de un mes para...¡¡¡"RAMBO V: LAST BLOOD"!!!
Pd: A Ludmilla Drago (Brigitte Nielsen) podrían haberle dado más juego... Su cameo es insuficiente.
2 comentarios:
De acuerdo en todo hasta la ausencia de papel de la nielsen
Bernardo de Andrés - Me ha parecido muy floja Mr. B y mira que que cuesta ser objetivo con Sly Stallone, sobre todo con Rocky, pero la épica brilla por su ausencia, las interpretaciones no llegan y el tufo a refrito S. XXI se palpa por todas partes. Veremos lo que hace con Rambo...
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